La carne de vacuno es una de las favoritas en España. El sector vacuno representa en España el 5,9% de la Producción Agraria nacional, según los últimos datos del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente.
El sabor, jugosidad y diversidad de la carne de vacuno lo convierte en uno de los principales platos de las grandes cocinas.
Para perfeccionar su preparación, es importante conocer el origen de la carne de vacuno. Hay varios tipos según diferentes criterios. Para esta clasificación se observa la raza de los animales, su edad, peso, color, etcétera.
La calidad de la carne también se mide en el lugar donde se cría, la alimentación de los animales y la cantidad de grasa que lleva el producto.
Carne de vacuno: tipos y edades
Carnes blancas y rojas. Es la diferenciación más conocidas en la clasificación de la carne de vacuno. Las carnes blancas son las que se obtienen de animales jóvenes, como la ternera. Mientras que las rojas son de ganado adulto, por ejemplo las vacas.
En función de la edad del animal cuando se comercializa encontramos cuatro tipos diferentes:
- Hasta 12 meses: la ternera. Su carne es blanca y rosácea porque apenas han comido pasto. Su principal alimentación es la leche materna. Tiene textura tierna y sabor suave.
- Entre 10 y 18 meses: carne de vacuno joven o ternera añeja. El animal puede ser macho o hembra y ya ha comido pastos. Es por esto que la carne empieza a tener más sabor.
- Entre los 14 y los 18 meses: novillo. Es una carne de color rojo y textura hilada. Pueden ser macho o hembra y están alimentados solo de pasto. Su sabor empieza a ser intenso.
- Menos de 48 meses: cebón. Es una carne más prieta, con color rojo oscuro y grasa veteada. El animal es un macho castrado y su sabor refleja los años de maduración.
- Mayor de 48 meses: vacuno mayor. Son machos o hembras que presentan una carne muy roja. Los matices de la carne varían según si es vaca, toro o buey, pero la variedad de sabores que ofrecen es realmente amplias.
Nuestro ganado vacuno se cría en libertad en la Sierra de la Demanda, en Burgos. Por eso su sabor a Sierra se nota con independencia de la edad del animal.
En Demanda Vacuno mantenemos la frescura y la esencia natural del origen de la carne de vacuno. El proceso se nota al probarla.